Thore´s artmachine 2.0

El comienzo

La idea de construir una máquina que pintara de forma independiente le llegó al artista Thore Sundermeyer de forma muy espontánea. Estaba experimentando con imágenes abstractas cuando se le ocurrió llevar a cabo este proyecto. Al realizar sus obras, normalmente aplica una capa de pintura sobre otra. “Este proceso realmente no es nada complicado”, por lo que el artista se preguntó: “¿Por qué una construcción o una máquina no pueden hacer este trabajo?”. Luego, improvisó una construcción en la que se colocaron dos lienzos uno encima del otro. Arriba de ellos montó una lata vieja y le hizo un agujero para que la pintura pudiera caer sobre los lienzos. Esto funcionó bastante bien y los resultados satisficieron al artista. Él no siguió usando la construcción ya que decidió enfocarse en otras ideas. Unos meses después, el artista tuvo una entrevista con el personal del museo Leonora Carrington sobre sus obras, fue aquí donde les contó sobre la máquina del arte y acordaron hacer una colaboración para exhibirla, así el público podría ver cómo funciona y cuáles son los resultados del proceso.

La segunda ronda

El artista no quiso exhibir una construcción improvisada de la máquina, por lo que trabajó en una segunda versión en diciembre de 2021. Esta consiste en una construcción de madera con un tronco de árbol al pie para estabilizarla. La parte más importante son los tres lienzos, que están tensados entre seis varillas con abrazaderas. Encima y en su parte trasera hay varias construcciones con grifos y tubos, los cuales tienen la tarea de transportar lentamente una mezcla diluida de acrílico y agua sobre los lienzos dejándola caer. Incluso, una construcción de tuberías conduce al segundo nivel de los lienzos para no mezclar los colores. Dado que los lienzos no están recubiertos, la pintura gotea a través de estos y en cada paso adquieren una coloración interesante, cuando la mezcla se seca forma una estructura que asemeja la formación de cristales. El mayor desafío para él fue construir los grifos y los tubos de tal manera que la pintura fuera dirigida y no drenada al azar.

La presentación en el museo

Detrás de la máquina hay tres imágenes que presentan los resultados de las primeras ejecuciones. Estos fueron enmarcados y estirados por el artista. Además, debajo de la máquina hay una charola de plástico, que cumple la función de recoger el exceso de pintura para que no se escurra al suelo. En teoría, el artista tendría la oportunidad de exhibir más de sus cuadros en la misma sala, pero para no saturar el lugar, sólo se presentan dos obras más.

La filosofía

Preguntémonos: ¿Qué es exactamente la obra de arte aquí? Todo el mundo piensa que el arte son las pinturas, sin embargo, estas obras fueron producidas mecánicamente por una máquina. La máquina es obra del hombre, de modo que la máquina es la obra de arte, no las pinturas. Todas las personas que asistan a la exposición pensarán algo como "Oh, emocionante, una máquina que hace arte", aunque en realidad la máquina misma ya es el arte. Esto obliga al espectador a cuestionar la forma en que identifica los objetos de arte como tales y los distingue de otros tipos de objetos.